La Fábrica del Pilar de Motril
En la primavera del año sesenta y uno, del pasado siglo, empecé a trabajar en la Fábrica del Pilar de Motril . Por este tiempo, había que coger una recomendación para poder trabajar, por lo que en una de las veces que estuvo en la casa de mis padres uno de los jefes mi padre le pidió este favor. En el cortijo en estos años no se encontraba nada de trabajo, por esto empecé de ayudante en las máquinas del vacío, con el encargado “El picahigos” que tenía una taberna en la calle de las cañas. Estos ingenios no paraban durante toda la campaña ya que me tocaba trabajar todos los viernes santos, en las máquinas del vacío. En la puerta de entrada estaba el guarda que registraba la salida de los obreros , después el patio de los naranjos y el depósito del agua que subía el agua de la acequia; enfrente de una puerta alta se entraba para varios departamentos , en la derecha los filtros y los molinos con tres grandes rodillos que extrujaban las cañas. En la parte de la izquierda l